En el oeste, las rutas surgidas del transporte a campo traviesa se hicieron legendarias (en promedio un viaje cubría alrededor de 16 a 24 km diarios), tales travesías estuvieron plenas de durezas y peligros. Por sus servicios los vaqueros ganaban alrededor de un dólar al día.​ Una vez pagados, la mayoría de ellos se dirigían a los burdeles, salones y casas de apuesta de las ciudades ganaderas.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *